LIBERAN A CHAVIANO, EL PRISIONERO DE CONCIENCIA MAS ANTIGUO DE AMERICA
LATINA
Sagua la Grande-10 de Agosto -2007- La liberación nuestro compatriota sagüero el opositor Francisco Chaviano
después de 13 años de prisión nos sorprendió en la mañana de hoy cuando a las 11:00 a.m. salió de la cárcel bajo libertad
condicional en muy malas condiciones de salud.
“Estoy
de vuelta del infierno” -declaró Chaviano- “si Dante hubiera conocido el Combinado del Este no hubiera necesitado
su imaginación para escribir El Infierno, simplemente hubiera contado lo que vio allí''.
Chaviano
estuvo cinco años encerrado en una celda sin poder tomar la luz del sol, dos años sin visitas y cuatro años sin visitas conyugales,
según ha declarado a la prensa. "Fue un ensañamiento cruel que también se extendió a mi familia, a mi esposa, a mis hijos''.
Con 54
años de edad se ha convertido en el prisionero de conciencia más antiguo de América en
los tiempos actuales y quizás este fue uno de los factores que el régimen militar de los Castro tuvo en cuenta para su excarcelación
tras el temor del escandaloso record que ha sido de la atención de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y de la Comisión
Interamericana de la OEA, aunque en realidad su condena de 13 años ya había sido cumplida desde el 7 de mayo.
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Francisco Chaviano González nació el
7 de marzo de 1953 en Sagua la Grande, provincia de Villa Clara. Su abuelo, José González Valdés, fue coronel del Ejercito Libertador
que ganó la independencia de Cuba de las manos de España, y mas tarde fungió con los mismos
grados en el Ejercito Nacional de la recién creada República de Cuba. Al cumplir 7 años de edad su familia se traslada a la
Ciudad de La Habana y en el año 1975 comienza a trabajar como Jefe del Departamento de Organización del Trabajo y Salarios
de la fabrica de ómnibus Girón, donde empieza a constatar según sus propias palabras "lo absurdo, irracional e infuncional
de la economía cubana". En 1980 abandona ese puesto y comienza a ejercer como Profesor de Matemáticas en el nivel Medio Superior,
posición que abandona en el año 1984 por discrepancias con el sistema educacional del régimen castrista. Después de abandonar su trabajo de maestro comienza a laborar como Jefe de una Brigada Especial de Obras de Construcción del Ministerio del
Interior, puesto del que es expulsado en octubre de 1988 debido a sus frecuentes criticas
abiertas a Fidel Castro. Producto de esta situación, intenta abandonar el país de forma clandestina en marzo de 1989, pero
es apresado y conducido a Villa Maristas, Cuartel general de la Policía Política castrista, de donde es conducido con posterioridad
a la Prisión de Quivicán, en la provincia Habana. Una vez dentro de ese penal funda allí el Consejo de Lancheros de Cuba,
organización dedicada a aglutinar a la mayoría de los cubanos presos o ex presos por haber intentado hacer uso del derecho de salir del país por su propia cuenta.
Al salir de la cárcel comienza a desarrollar un amplio trabajo con dicha
organización, documentando casos de personas desaparecidas en el Estrecho de la Florida en busca de libertad. La actividad
de denuncia desplegada en ese campo es tan intensa, que contribuye de manera decisiva a que el gobierno cubano se vea precisado
a cambiar su postura con relación a esa causa, reduciendo las condenas a los individuos capturados en el intento de escapar
de la Isla. Al comprender que las causas de este éxodo sistemático obedecen, según sus palabras "a la discriminación social,
el apartheid turístico, la legislación laboral y en sentido general la falta de los derechos inalienables" que sufre el pueblo
cubano, deciden extender el radio de acción de la organización y cambiar su nombre por el de Consejo Nacional por los Derechos
Civiles en Cuba.
Esta toma de conciencia no pasa inadvertida para los cuerpos represivos
del gobierno cubano. Francisco Chaviano comienza a ser víctima
de acoso e intimidación por parte de la Seguridad del Estado, siendo el más notorio de estos incidentes el ocurrido el 7 de
marzo de 1994, cuando cuatro hombres armados invadieron su casa y lo golpearon ante la indiferencia y el beneplácito de las
autoridades castristas. Este incidente fue denunciado por Amnistía Internacional, que el 15 de marzo emitió una Acción Urgente
expresando su condena y preocupación por el caso de Chaviano. Pero esto no frenó la furia represiva de Fidel Castro y sus
servidores. El 7 de mayo de 1994, el presidente del Consejo Nacional por los Derechos Civiles en Cuba fue detenido por la
Seguridad del Estado y conducido a Villa Marista, donde se le fabrica una falsa acusación de "Revelar secretos concernientes
a la Seguridad del Estado". Después de permanecer 11 meses incomunicado en la llamada Lubianka cubana, Chaviano fue finalmente
condenado a 15 años de prisión en un juicio carente de las más mínimas garantías procesales.
Recluido en la actualidad en la prisión Combinado del este, en la ciudad de La Habana, fue proclamado el 11 de mayo de 1994
como prisionero de conciencia por Amnistía Internacional, que emitió otra acción urgente pidiendo su liberación. Ocho días
después, el 19 de mayo, el Departamento de Estado norteamericano emitió un comunicado oficial respaldando su labor y solicitando
su liberación inmediata.
A pesar
de todos los intentos de la dictadura por aniquilarlo con su odio irracional, Francisco Chaviano González es un hombre de profundas convicciones humanistas y sentido
de nación. Como el mismo dijera en un documento enviado al exterior, "Mi lucha, es convencer a las partes de la necesidad
de retirarle a tiempo el apoyo tanto a aquellos que quieren hundir la Isla en el mar, como a los que están obcecados con la
venganza, pues por encima de estos mezquinos intereses está la nación cubana, que no es mas que la comunidad de intereses
y derechos individuales de todo un pueblo."
Causa 132/95, juzgado abril 15, 1995 por un supuesto delito de "revelación de secretos
concernientes a la Seguridad del Estado". Tiene 50 años de edad, casado con Ana Bélgica Aguililla Saladrigas. Es maestro de
profesión, su familia reside en calle 236 #129 e/ 3 y Jaimanitas, Playa, Ciudad de la Habana. Le ha sido denegada la solicitud
de revisión de su caso, ha sido enviado en reiteradas ocasiones a celdas de castigo y al cuartel general de la policía política.
Sufre de hipertensión arterial, artrosis y desordenes digestiva.
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